Los granadinos enfadados y con toda la razón

Mi viejo amigo el hombre de Orce vuelve a estar de moda. ¡Al fin! (perdón por la emoción) este año los expertos han vuelto a buscar restos humanos en esta zona de Granada. Sólo han tardado casi 30 años desde que Josep Gibert descubriera los primeros restos en Venta Micena.
Como manda la lógica científica y el uso de la razón, van y los buscan por todos lados menos donde se encontró el primer resto. Han excavado en Barranco León y Fuente Nueva 3, todo menos mirar en Venta Micena, no vaya a ser que dieran con más huesos de nuestros antepasados. Si he de ser sincero la culpa no es por completo de los científicos, es de la Junta de Andalucía que no da permiso para trabajar allí, aunque sospecho que si la comunidad científica hubiera ejercido la presión adecuada el gobierno andaluz no habría tenido más remedio que firmar el papel.
Sea como sea, el tiro igual les ha salido por la culata porque han encontrado dos herramientas y huesos de animales con marcas hechas por humanos. Como siempre lo mejor la datación. Calculan que pertenecía al Pleistoceno Inferior que llega hasta hace 1.620.000 años, pues los restos hallados tienen 1.300.000 ¿Por qué siempre estas dataciones tan bajas? La respuesta es fácil, porque Orce hace temblar la historia de que el hombre viene de África. De encontrarse los restos allí los habrían datado en 1.600.000 años ¿Lo dudas?
En Georgia se dataron los hallazgos en 1.200.000, después 1.500.000, después 1.700.000 y este año han alcanzado la edad de 1.800.000 años. Conforme se encuentran restos más antiguos los georgianos van aumentando su edad, porque sino, no cuadra que el hombre pasó por allí de África a Europa y Asia. Los chinos, con restos incluso más antiguos, dicen que era al revés, de Asia a África, pero, bueno, nadie les hace caso, ya se sabe lo copian todo.
Las posibilidades de Orce nadie las conoce. Únicamente se han mirado 300 metros cuadrados de un total que supera el millón, es el yacimiento más grande del mundo y sólo se ha arañado la superficie ¿Qué esconderá bajo tierra? Los africanistas no están de acuerdo, cosa rara, dicen que los de África son más grandes, y es que puestos a buscar puedes buscar por todo el Sahara, otra cosa es que encuentres algo.
Josep Gibert pasó años hasta su muerte en 2007 pidiendo nuevos permisos, su hijo Luis también los pidió ofreciéndose a pagar las investigaciones de su bolsillo, el Premio Nóbel José Saramago se cansó de decir que Orce era de vital importancia, la Junta de Andalucía nada de nada, no dio más que algún permiso suelto y corto.
Los hechos de Orce han indignado a los granadinos, en Internet los foros de discusión demuestran su perplejidad ante una negativa incomprensible para realizar investigaciones coordinadas y serias. Las nuevas generaciones no conocían nada de esto y se han quedado a cuadros ¿Por qué se gastan 12.000.000 de euros en cambiar las papeleras de Madrid y no hay dinero para Orce? (cada papelera salió a 1.166 euros) La investigación de este año ha costado 170.000 euros. Y lo más incomprensible ¿Por qué la Universidad de Granada no la ha realizado? A la junta le debió dar un retortijón de tripas ante esta pregunta y tras el lío de Internet corrió a publicar que de los 45 especialistas 3 eran granadinos.
Antes de que los cazatesoros se lancen, yo iría declarando Orce como zona protegida, de la humanidad, de interés del mundo mundial y parte del extranjero o el titulo que quieran, pero protegida. Comenzaría a encargar una estatua para Josep Gibert, que el hombre se la ganó a pulso por luchar contra el anticientifismo científico e iría comprando un bolígrafo con el que firmar la autorización para Luis Gibert, su hijo, al que se las han hecho pasar canutas como a su padre.
Vuelven a excavar el año que viene, no me extrañaría que una empresa multinacional compre todos los picos y las palas de Granada, porque como hagan un hoyo profundo igual nos llevamos la sorpresa del siglo.